Probablemente habréis visto en la tele o en alguna red social los últimos dos casos ocurridos en los zoológicos, uno chileno y el otro estadounidense. En ellos, para salvarle la vida a un imprudente y a un niño se han tenido que sacrificar dos leones y un gorila, ambas especies en peligro de extinción.

Mientras que leo las noticias y veo los comentarios de muchas personas  que alrededor del mundo se han sentido indignadas con esta situación, sobre todo con la ocurrida en Chile, siendo el imprudente un hombre de 20 años que intentó suicidarse lanzándose a los leones, llegan a mi mente frases  pronunciadas por el director de uno de los zoológicos “El protocolo de emergencia tiene como foco la vida de las personas y la vida de los animales. Pero ante un riesgo inminente, no pondríamos nunca en riesgo la vida de las personas”. Y me pregunto ¿hasta qué punto somos los seres humanos superiores a los animales que nuestra vida vale más? Lo cierto es que la imprudencia de una persona con problemas seguramente mentales ha causado la muerte a dos leones, y por otro lado la de una madre que descuidó a su pequeño de solo 4 años, finalizó con un niño herido por la fuerza de un gorila y el sacrificio del mismo para salvar al menor.

Mientras la polémica crece como espuma, y algunos defienden a los animales, otros a los humanos y otros dicen que en el caso del hombre que se quería suicidar y que era un adulto pues es su decisión y que por su parte con el niño pues…¡es un niño!, y no tiene culpa del descuido de su madre, entonces no está mal matar al gorila…. En fin mil teorías distintas, y me gustaría recordar que nuestra imprudencia no puede ser bajo ningún punto mayor que el respeto que tengamos por los animales.

Los animales salvajes no están para entretener, no son mascotas y tienen un hábitat que aunque está amenazada por nosotros los humanos sigue siendo su hábitat. El enfado y la indignación  de muchos con este tipo de situaciones no lo veo injustificado pues lamentablemente esta no es la primera vez que casos como estos suceden en zoológicos. Según he visto, la mayoría de las veces ha sido por la borrachera de unos desubicados a los que se les ocurre ir a pasar la cruda al zoológico, la imprudencia de otros por querer tomar mejores fotos de los animales, o recoger una gorra que se les ha caído. En fin, imprudencia humana en su máxima expresión que termina muy mal pues a pesar de que esta vez los dos humanos han sobrevivido por la acción de los tiradores de los zoológicos que han disparado a los animales hasta su muerte, en otros casos los leones, perros salvajes, osos u otros animales han devorado a las personas.

El debate de los zoológicos y acuarios continúa abierto, y bien sabemos que estos lugares se han visto comprometidos en diversas ocasiones alrededor de todo el mundo porque su objetivo de proteger a los animales y su labor de conservación de las especies vulnerables en cautiverio, se ve empañada por una función absurda de entretener a los curiosos que los visitan.  Pero atención, no digo que todos los zoológicos sean así. A lo que me refiero es a que seguramente habéis tenido la penosa oportunidad de ver animales como gorilas, o elefantes, encerrados en unos lugares tan pequeños en relación con su tamaño que solo se puede pensar en cuán infelices son en aquel sitio.

Creo que es necesario recordar que los animales salvajes no son mascotas, como bien lo sabía el que intentó suicidarse lanzándose a los leones, mucho menos están en el planeta para entretenernos, y es que pensemos un poco… podéis imaginar el estrés que representa para cualquier individuo cuya casa es el océano entero tener que vivir en una piscina y encima de todo tener que ser sometido incluso a maltratos por parte de sus entrenadores para aprender a hacer piruetas que se repiten los fines de semana cada dos horas. Sinceramente que pena me dan los animales de los zoológicos y acuarios, pero aún más pena me dan las personas que para entretenerse necesitan hacer tanto daño a otros seres vivos.

Recordemos y enseñemos sobre todo a los más pequeños que el respeto por la vida también incluye la vida de los animales, de las plantas y en general de todos los seres vivos con los que compartimos el planeta.

Rosely Rojas Rizzo

 

Si no has visto las noticias sobre este tema puedes mirar algunos videos aquí:

Un hombre se lanza a los leones en un zoo de Chile

Matan a un gorila para salvar a un niño