Fotografá:  George Becker from Pexels

Cada año hay más y más empresas que intentar ganar el título de “líderes en la sostenibilidad”. La designación de esta importante característica corresponde a las empresas S&P Dow Jones Indices  y RobecoSam, que cada año desde 1999 publican el índice de sostenibilidad de Dow Jones, que, como dice la misma palabra, evalúa la sostenibilidad de miles de empresas por el mundo.

La importancia que está recibiendo de año en año este índice es un reflejo del cambio que está ocurriendo en la sociedad. De hecho, los consumidores están cada vez más informados y son cada vez más exigentes en relación a los productos que compran y a los impactos sociales y ambientales causados por los fabricantes.
Caso emblemático de este cambio de mentalidad es el escándalo que surgió sobre el aceite de palma. Las reivindicaciones (empezadas por un grupo de ambientalistas) en contra de la destrucción de miles y miles de hectáreas de selva han iniciado un proceso de sensibilización de la sociedad, obligando las empresas a quitar el aceite de palma de muchos productos.

Esto es el ejemplo perfecto de cómo la sostenibilidad ambiental influye en la ganancia de una empresa, principalmente por un cambio ocurrido en el comportamiento de los consumidores y de los inversores –  ya que los agentes financieros se fijan hoy en la sostenibilidad ambiental y social (aparte de la económica) para evaluar una empresa.

Entonces–como ya se preguntaba Aristóteles– “Qué fue antes, el huevo o la gallina?”.

Dicho de otra forma, las enormes multinacionales son sostenibles de verdad o se están volviendo más sostenibles para obtener una puntuación mejor en los índices de sostenibilidad? Sea la respuesta que sea, si el resultado final es que las empresas mejoren sus estándares de sostenibilidad, creo que se pueda considerar de todas formas un éxito. Así por ejemplo la empresa Coca Cola – acusada durante años de comerciar una bebida con demasiado azúcar y mala para la salud – ha empezado a producir la línea “Zero” de sus productos. O muchas empresas de coche están invirtiendo dinero en la fabricación e investigación sobre los coche eléctricos.

El índice de sostenibilidad de Dow Jones analiza la dimensión económica, social y ambiental de cada empresa, a través de un cuestionario (Corporate Sustainability Assessment) que es rellenado por las mismas empresas. Las preguntas tocan temas como la estrategia de las empresas para reducir el cambio climático, el desarrollo del capital humano o las políticas anticrimen.

Los cuestionarios cambian en función del sector industrial, organizando las empresas en 24 grupos industriales en total.  Al final del análisis se individualiza, para cada sector, una empresa “líder”: básicamente, una empresa que lo ha hecho mucho mejor que las otras.

¿Por qué las empresas se preocupan tanto por obtener una alta puntuación en el índice de Dow Jones?

A continuación, vamos a ver cuáles son las empresas que han destacado por sus prácticas sostenibles en 2017.

El líder en coches a baja emisión: Peugeot

El Grupo SPA es un líder en términos de bajas emisiones de CO2, produciendo sus coches una media de 102,4 gramos por kilómetro. Aparte de la fabricación y venta de coches, la empresa francesa está invirtiendo mucho dinero en los servicios “smart” (como por ejemplo el carsharing), en el desarrollo del capital humano y en la mejora de las prácticas laborales.

Coca Cola Hellenic Bottling Company: un ahorro de más de 2 mil millones de litros de agua

Coca Cola HBC es una de las mayores empresas que trabaja (embotellando) para el coloso Coca Cola. La empresa ha obtenido la máxima calificación en aspectos como envasado, riesgos relacionados con el agua, desarrollo del capital humano y prácticas laborales.
En relación a la reducción de consumo de agua y energia, Coca Cola HBC ha conseguido resultados increibles, disminuyendo el consumo de agua en 2 mil millones de litros y bajando la emisión de CO2 un 6,2% en un solo año.

Las mejores políticas en tema de derechos humanas del sector: Inditex

Más de una empresa española ha sido elegida como líder de su sector. Entre estas, tenemos la famosísima Industria de Diseño Textil SA (Inditex) para el sector de la venta a por el menor, la Amadeus IT Group SA para el sector de los softwares y la Red Eléctrica Corp SA en el sector de los servicios públicos.

Volviendo a Inditex, la multinacional destaca sobre todo en el tema de promoción de los derechos humanos y políticas ambientales. De hecho, en los últimos años ha disminuido considerablemente el consumo de agua y electricidad y se ha desarrollado el programa Closing the Loop, cuyo objetivo es reducir la basura que acaba en el vertedero. En 2016 se han reciclado más de 16,848 toneladas de textil, acercándose así la empresa al ambicioso objetivo de producir cero residuos en 2020.
Last but not least, varias tiendas fueron renovadas para alcanzar los estándares de eficiencia más exigentes, produciendo como resultado un 71% de tiendas eco-eficientes.

Medicamentos para todos: el buen ejemplo de Abbott

Abbott, industria sanitaria con sedes en más de 150 países, destaca de las otras empresas por su compromiso en el tema de la sostenibilidad social y ambiental. De hecho, ha promovido una línea de productos médicos en India fácilmente accesible a la mayoría de la gente, ya que el 70% cuesta menos de 7 rupias. Además, está invirtiendo en 130 proyectos para mejorar la gestión de los residuos, del agua y de la energía. Hoy en día, la empresa ha conseguido reducir del todo (residuo cero) sus residuos en 12 países y ha reducido las emisiones de CO2 producidas un 28%.

Las empresas de las que hemos hablado han ganado el titulo de empresas líderes, es verdad. Pero, hay que tener en cuenta que esto no significa que sean empresas virtuosas y sostenibles al 100%, sino que son las mejores respecto a las otras del sector.

Todavía hay mucho que trabajar para que se cree una sana competición entre las empresas, para que todo un mismo sector se ponga a la prueba de intentar alcanzar el “reto de sostenibilidad 2.0”.

Benedetta Eleodori