Cuando pensamos en especies al borde de la extinción, pensamos en el oso panda, en el oso polar, en los delfines, en el lince ibérico, etc. ¿Qué tienen en común estas especies para ser tan conocidas y queridas? La respuesta es muy sencilla. Son animales muy fáciles de querer. Si lo pensáis un momento, estos animales que he comentado son muy acariciables y muy fotogénicos; en otras palabras, son animales con mucho estilo.

A todos nos encantan los osos panda y los linces, serian la mascota perfecta, sin embargo existen muchas más especies en peligro de extinción, aunque no sean muy glamourosas. Por ello, en este artículo, vamos a hacer mención a algunas de ellas.

La primera de estas especies es la Patella ferruginea, un molusco marino que habita en el mar Mediterráneo dentro del piso mesolitoral superior (que se sumerge y se descubre según la altura de la marea). Es una lapa de gran tamaño que puede llegar a alcanzar los 10 cm y llegar a vivir hasta los 30 años. Es una especie muy amenazada debido a la acción humana sobre el litoral, como lo es la destrucción de sus hábitats naturales o la contaminación de las aguas.

Esta especie se encuentra en peligro de extinción, únicamente posee poblaciones en una pequeña franja del litoral andaluz, que abarca la provincia de Málaga y de manera testimonial Granada, así como en los enclaves españoles de África como Ceuta, Melilla o las Chafarinas.

La segunda especie es el Limonium malacitanum, coloquialmente llamada la siempreviva malagueña. Esta planta tiene la particularidad de vivir en roqueros a escasos metros del mar, ya que necesita que sus hojas estén en contacto con el salitre marino. De hecho, esta especie es relativamente fácil de hacer cultivar en un vivero, pero si no está en contacto con el salitre del mar morirá.

La principal amenaza de esta planta es la misma que afecta a la Patella ferruginea, esto es, la pérdida de su hábitat por culpa de la presión humana. Esta planta se encuentra aislada en pequeñas poblaciones entre Torremolinos y el Paraje Natural Maro y Cerro Gordo, lo que dificulta su conservación, ya que la pérdida de algunas poblaciones con pocos individuos, como la de la Araña o la del Faro de Torrox, aumentará el ya elevado estado de separación entre las poblaciones.

La tercera especie con un elevado riesgo de desaparición es la pardela balear (Puffinus mauretanicus). Esta ave marina se encuentra en peligro crítico de extinción debido a la alteración de su hábitat natural (el litoral, al igual que las especies anteriores) y la alteración de su zona de cría debido a la introducción de ratas.

Considerada como la única ave marina endémica de España, esta especie es una estratega de la K, esto es, que vive muchos años y tiene pocas crías por año, por lo que la muerte de individuos de forma no natural afecta enormemente a la pardela balear.

La cuarta especie es la favorita de Batman, el murciélago ratonero patudo (Myotis capaccinii). Esta especie de quiróptero se distribuye por la Región de Murcia y la Comunidad Valenciana, aunque también se puede encontrar en más puntos del Mediterráneo. Esta especie está en regresión, debido fundamentalmente a la destrucción de las cuevas donde habita, y las masas de agua que utiliza para alimentarse, ya que esta especie de murciélago, además de alimentarse de insectos, también tiene la capacidad de pescar, siendo su presa favorita la gambusia.

La quinta especie que quiero destacar es un pez de agua dulce, el Fartet (Aphanius iberus). Este pequeño pez no llega a superar los 5 cm de longitud y tiene un marcado dimorfismo sexual, esto es, los machos y las hembras tienen un aspecto diferente. El Fartet es un estratega de la R, esto es, tiene una vida corta, pero se reproduce muy rápida y abundantemente.

La principal amenaza de este pez es la introducción de la anteriormente mencionada gambusia, especie invasora que desplaza al fartet a las zonas más salinas. Sin embargo, también tengo que destacar la amenaza que ejerce sobre el Fartet la fragmentación del hábitat, la contaminación de las aguas y la acción del cangrejo americano.

Recientemente, la población de los ríos atlánticos andaluces del Fartet han sido considerados como una nueva especie, con el nombre de Aphanius baeticus. Sin embargo, el estado de conservación de esta nueva especie es igual de amenazado que el del Fartet.

Estos son solamente alguno de los ejemplos que podría poner, pero hay muchas más especies amenazadas que se encuentran marginadas por la opinión pública. Es cierto que hay muchas especies amenazadas y que es imposible que la ciudadanía las conozca todas; por ello los medios de comunicación y algunas ONG ambientales hacen una criba, dando a conocer sobre todo a aquellas especies más “monas” para un fin que puede parecer perverso, pero en muchas ocasiones es necesario, como lo es obtener financiación para proyectos medioambientales.

También es importante señalar que muchas especies actúan como paraguas sobre una región. Un claro ejemplo de esto es el Lince Ibérico, ya que para conservarlo como especie se actúa sobre su hábitat y sobre su principal presa, el conejo, de tal forma que todo el entorno natural donde vive el lince se ve favorecido por la conservación de una sola especie. Hecho similares ocurren con el águila imperial, el oso o la poseidonia oceánica.

A pesar de todo lo anteriormente expuesto, existen casos en los que las especies amenazadas deben ser conocidas por la población local, ya que hablo de especies endémicas de una región. Como ejemplo tenemos a la siempreviva malagueña, que solo habita en la costa de Málaga, y por lo tanto, debería ser ampliamente conocida por los malagueños, sin embargo esto no es así en absoluto.

En muchos casos las especies endémicas le dan valor a un territorio, como el oso panda a China, lo que hace que el gobierno chino considere al oso panda como patrimonio nacional. Sin embargo, esto solo se hace con especies bonitas, dejando de lado endemismos amenazados como la manzanilla de Sierra Nevada (Artemisia granatensis), especie en peligro crítico de extinción que solo existe en el espacio protegido de Sierra Nevada y que se encuentra fuertemente amenazado por la recolección de ejemplares por la población local.

Sin embargo existen casos en los que divulgar la situación de amenazas de especies bonitas puede ser beneficiosa para crear conciencia ecológica, sobre todo durante la infancia. En este momento de la vida si es aceptable que se hable de las especies más vistosas, pero únicamente para que los niños puedan entender lo que es la extinción y que es necesario actuar entre todos para evitar que esta se lleve a alguna especie más por culpa del ser humano.

Para concluir este artículo, quiero que se haga una profunda reflexión sobre lo superficiales que somos a la hora de destinar recursos a especies amenazadas, ya que en muchos casos, hay especies que se ven marginadas a la hora de hacer divulgación ambiental debido a que no son bonitas de cara al público. La divulgación de las especies silvestres amenazadas debe hacerse únicamente con criterios biológicos, potenciando los casos en los que la ciudadanía pueda hacer más por la especie, como el caso de la manzanilla de Sierra Nevada.

Santiago Fernández
@santidanifp

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Fotografía: artemisia granatensis